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Aries 2005 - Jos� Enrique Hueso |
�Surjo y desde el plano de la mente rijo� El camino al Coraz�n del Sol.
�El Coraz�n del Sol. Cuando dicho coraz�n ejerza control, entonces el hombre espiritual vivir� simult�neamente una vida dual (problema del hombre iluminado por el alma y por la luz del d�a) que implicar� nuestras aparentes experiencias y situaciones y nuestra percepci�n espiritual interna del alma. La personalidad seguir� respondiendo a las influencias que le llegan del Sol f�sico, pero las actividades de la vida y la experiencia subjetiva del hombre interno ser�n condicionadas por las energ�as que le llegan del �Coraz�n del Sol�. (1) Astrolog�a Esot�rica. Aries, El Carnero. p�g. 93. AAB-MT.
Entonces la pregunta ser�a �Qu� podr�amos hacer para ser sensibles tanto a la luz del Sol f�sico, como a la luz de Coraz�n del Sol?
La luz del Sol f�sico incide en nuestra forma o cuerpos f�sico, et�rico, astral, mental y la personalidad y el Coraz�n del Sol influencia nuestra Alma.
El lema de Aries es �Surjo y desde el plano de la mente rijo�, (2), el sendero de la evoluci�n nos lleva a ir subiendo pelda�os la conciencia, de estar enfocada en cosas f�sicas y materiales pasamos a centrarnos en el aspecto emocional de la vida, pero el camino sigue y desde la mente podemos gobernar nuestra vida, seguir interes�ndonos las cosas que nos dan un bienestar f�sico y emocional pero desde la perspectiva de la mente, es decir desapeg�ndonos levemente de los impulsos que nos mueven a actuar, crear un intervalo entre impulso y reacci�n, ver venir ese impulso por ejemplo de ira cuando vemos una injusticia, observarlo y que seamos plenamente consciente de que acci�n vamos a asumir, por que lo hacemos y que consecuencias en nosotros y en el entorno va ha generar.
Ese peque�o intervalo de observaci�n nos va a abrir un mundo de posibilidades, pero vamos a perder la dulce seducci�n de hacer las cosas por que nos apetece hacerlas, por que principio y fin, nacimiento y muerte son fases de un mismo ciclo, no podemos iniciar algo, si no nos liberamos de algo que ya no nos sirve, por ejemplo nacer a la libertad es morir a la ignorancia, la libertad es asumir la responsabilidad de enfrentar decisiones, y no dejarnos llevar por m�s inercias, la inercia de est�mulos internos, la inercia de hacer lo que el grupo hace, sin observar, ni preguntar.
Cuando nos detenemos a observar desapegadamente rompemos una inercia, es como si nos baj�ramos de un autob�s del que no ten�amos conciencia de su existencia, y en esa soledad de no estar llevado por nada, podemos ver el mundo sin las prisas de siempre, sin los deseos y temores de siempre, y descubrir un anden con los indicadores de cientos de autobuses y ser nosotros los que decidamos, no en base a impulsos o intuiciones sin referencias, sino plenamente conscientes del camino, de donde venimos, a donde vamos y por que tomamos una elecci�n y no otra.
Aries y la primavera
Aries es el comienzo y en el hemisferio norte la naturaleza retorna con sus alegres colores, con impulso de vitalidad despu�s de liberarse de las formas que en invierno empezaron a morir por que cumplieron ya con su ciclo vital, nuevas formas reclaman derecho a expresarse y existir, los nuevos brotes e ideas rompen la oscuridad del invierno y de la tierra buscando la luz del Sol.
De esa actividad parece contagiarse el ser humano, nuevos impulsos, proyectos, ideales, el ansia de hacer cosas nos invade, y cuando m�s hacemos m�s parece que somos nosotros mismos por que estamos haciendo cosas que sentimos que tenemos que hacer, por que nos sentimos bien, por que queremos hacerlas, nos sentimos realizados� siempre que hayamos creado un vac�o entre nosotros y el entorno, aunque sea por unos minutos, por que si preguntamos a nuestro interior que es lo que quiere y desea, al mismo tiempo que queremos complacer el contexto ambiental en que nos movemos, lo que desee nuestro interior ser� lo que desee el grupo, social, espiritual, etc, y viene la pregunta �lo que desea el grupo, es lo que necesita nuestra Alma en su sendero evolutivo?... Solo la propia Alma sabe lo que necesita en su evoluci�n, que decisiones, experiencias y caminos son los m�s adecuados para ella, y por consiguiente para nuestros cuerpos y personalidad.
Cuando hemos andado por la vida un tiempo con ideas de servicio espiritual nos preguntamos que cosas hacer por el bien de la humanidad y se trata de hacer las mismas cosas de siempre pero si lo espiritual ha fraguado en nosotros m�s all� de la teor�a, y podemos encarnar en nosotros y en el medio que nos movemos las correctas relaciones humanas veremos el mundo con una perspectiva solar, es decir como si lo vi�ramos desde el Sol, �Qu� pasa cuando vemos nuestra ciudad desde la altura de una colina?, que no nos acordamos de las disputas del vecindario, y si subimos de perspectiva, nos vamos olvidando de la peleas entre ciudades, regiones, naciones� la perspectiva Solar significa que vemos la Tierra como una unidad de vida incluyente, y las diferencias entre hombres, p�jaros, monta�as, nubes� son casi anecd�ticas� y el Sol f�sico lleva luz y calor a todos los seres simplemente por el echo de ser luz y calor, irradia lo que es, si nosotros podemos ser paz y alegr�a, sin darnos cuenta estamos llevando paz y alegr�a a cada persona que nos acerquemos o acordemos.
El Coraz�n del Sol irradia Amor a todos los seres, �podemos asumir el reto de amar a todos los seres?, si contestamos que no podemos amar igual a un amigo que a un desconocido que sabemos que hiera y mata, entonces solo respondemos al Sol f�sico y nuestro coraz�n aun responde a la dualidad de amar seg�n simpat�as.
El coraz�n que responde y recibe Amor del Coraz�n del Sol, ha de actuar como el propio Sol, al Sol poco le importa que de su Luz y calor se beneficien las malas hierbas, se limita a Ser, es decir a irradiar, a dar.
El coraz�n que responde y recibe Amor del Coraz�n del Sol, irradia amor incondicionalmente, dando vida a las formas correctas que inciden en su esfera de influencia, las incorrectas simplemente desaparecen, no pueden existir formas incorrectas astrales, mentales o sociales, por que en el radio de acci�n de quien responde y recibe Amor del Coraz�n del Sol los devas constructores menores o lunares son sustituidos por devas constructores superiores o solares. Estas personas curan por irradiaci�n, curan y limpian formas f�sicas, astrales y mentales hasta donde llega su -circulo no se pasa-, que puede ser la familia, o una ciudad en el caso de grandes seres.
Estamos hablando de un camino, del camino ardiente al Coraz�n del Sol.
�El fuego ardi� y por medio de ese fuego he muerto a la vida y nac� a la muerte. Nuevamente he muerto para la forma� (Aries). (3) P�g. 83.
�La muerte por el fuego, o la ardiente muerte en Aries, libera al hombre para que entre en otro centro denominado Shamballa. (4) P�g. 84.
Arden los puentes al pasado que ya no existe Arden los puentes al futuro que aun no existe
Arden los puentes a otros seres y a lo conocido, se ha de partir donde los devas de fuego
Arden los puentes a los agnis, ellos son el puente y el fuego.
Puentes de fuego que se renuevan seg�n se renueva la pureza del aspirante.
Tenemos que aprender a crear intervalos entre sentimientos y pensamientos, para descubrir primero como nos est�bamos identificando con unos pensamientos y sentimientos que al final nuestro yo se perd�a en ellos, y descubrir luego nuestra capacidad de crear, por que cuando somos conscientes de lo que estamos pensando y sintiendo, y adem�s observamos con atenci�n que cosas ocurren en nosotros y en el entorno a ra�z de nosotros sentir o pensar una cosa u otra vamos a ir despertando una percepci�n de los mecanismos de la vida, es decir vamos a intuir como trabajan los devas construyendo situaciones ambientales, vamos a ver como los devas encuentran en nuestros templos, en nuestro coraz�n y mente, las ideas para construir nuestro mundo, si hay dolor, ira� construir�n nuevas situaciones para que sigamos con m�s dolor, ira� pero de la misma forma si encuentran paz, alegr�a� construir�n nuevas situaciones para que sigamos con m�s paz, alegr�a� en nuestras manos est� construir aqu� y ahora el mundo que queremos, �Qu� encuentran los devas constructores en nuestro coraz�n y en nuestra mente?
En est� �poca cada vez m�s gente est� desarrollando su capacidad de percibir a los devas constructores, pero de la misma manera que no nos debemos identificar con sentimientos, ni pensamientos, tampoco con los devas, y menos con devas constructores menores o lunares que construyen aquello que sentimos o pensamos, por que al final se crea un circulo vicioso que el deva constructor nos inspire que cosas le vamos a pedir que construya, acord�monos nuevamente de la perspectiva Solar, el Sol da vida a todo, pero no se preocupa de ello, se limita a Ser, y �que es el ser humano?, paz, alegr�a� si logramos serlo descubriremos los devas Solares que solo se acercan a los hombres si estos han transcendido lo que un comentario tan antiguo como el tiempo dice que �nada ser� revelado a quien conserve el deseo de modificar el entorno�, cuando solo nos importe SER, Ser paz, alegr�a, Amar a todas horas como el Sol ilumina y da calor a todas horas y a todos los seres, cuando deleguemos a nuestro �ngel Solar nuestro impulso de querer, hacer y modificar, entonces descubriremos a las jerarqu�as devicas solares, es decir a los devas o �ngeles que est�n entre los �ngeles Solares que nos gu�an y los devas constructores de formas f�sicas, astrales y mentales.
De tal forma que nuestra relaci�n con la evoluci�n d�vica ha de tender a:
Ser receptivos �nicamente hacia la l�nea ascendente; Alma, �ngel guardi�n y el �ngel Solar. Esta l�nea es el camino de evoluci�n, el camino de retorno a casa del Padre.
Ser receptivos y emisores, es decir interactuar como actuamos entre los seres humanos, desde la fraternidad y amistad con los devas solares que est�n Jer�rquicamente subordinados a Devas Solares de mayor evoluci�n y a la Jerarqu�a o quinto reino o reino de Almas, estos devas solares son los que se encargaran de dirigir a los devas constructores, ya que el mago blanco se comunica con el deva que ha de construir algo a trav�s del superior jer�rquico de ese deva, es como cuando el arquitecto de una obra comunica a los capataces cual es el plan.
En una era Acuariana que el servicio est� en ponerse la botas de agua para limpiar establos, es decir compartir las mismas condiciones que comparten los dem�s, ya no necesitamos del aislamiento en conventos apartados para escuchar o intuir la voz de nuestra Alma, podemos y debemos escucharla en medio del caos de una gran ciudad o en la circunstancia que nos podamos encontrar, el contacto es de naturaleza interna y no precisa de condiciones externas, aunque en alguna ocasi�n nos venga bien una temporada en el campo o en el monte� el medio y las circunstancias en que la vida nos ha colocado es el ideal para nosotros, solo hace falta crear un espacio neutro a nuestro alrededor, es como si nos detenemos un momento a observar nuestros pensamientos y sentimientos, nuestra atenci�n har� que cesen si surgen de nosotros, y si vienen del entorno haci�ndose pasar por propios los detenemos y ya esta, la cuesti�n es crear un intervalo de pensamientos y sentimientos, para en ese intervalo poder escuchar o intuir nuestro yo m�s sutil, noble y elevado.
(1) p�g.93. (2) p�g.91. (3) p�g.83. (4) p�g. 84 Astrolog�a Esot�rica. Aries, El Carnero. AAB-MT.
Un abrazo Jos� Enrique. |
Un espacio de trabajo y servicio para hombres y mujeres de Buena Voluntad de Argentina, Brasil, Uruguay e Iberoam�rica toda |
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