Hay,
probablemente, m�s individuos y grupos de gente en el mundo de toda clase
de creencias y capacidad dedicados a la idea de la curaci�n que a
cualquier otra necesidad humana. Sin embargo, la curaci�n es una ciencia
exacta y exigente y en la sociedad moderna ning�n m�dico o cirujano puede
practicar la antigua profesi�n de la curaci�n sin las calificaciones
personales legalmente reconocidas por el estado para la protecci�n del
p�blico. Sin duda, la oraci�n y la invocaci�n pueden ser efectivas bajo
ciertas circunstancias, particularmente cuando quien sirve es puro e
inofensivo en motivo y tiene suficiente entendimiento para cooperar con
los prop�sitos del alma del individuo, de manera de permitir que la
energ�a de curaci�n fluya m�s libre y efectivamente a trav�s de la
personalidad, o para proceder con el proceso de retiro, si ese es el
proceso inmediato.
La curaci�n esot�rica, sin embargo, incluye mucho m�s que
esto, es una ciencia basada en una cantidad de requerimientos, incluyendo
el conocimiento de la constituci�n del hombre y la naturaleza de los
diferentes cuerpos, tanto densos como sutiles. A este conocimiento
pr�ctico, la ciencia del ocultismo contribuye con vital informaci�n de los
factores energ�ticos, las influencias k�rmicas y de rayo, la psicolog�a y
la astrolog�a del alma, y las leyes y reglas fundamentales, para la segura
y exitosa pr�ctica de la curaci�n esot�rica. Con todo esto para abarcar en
comprensi�n y en aplicaci�n, no nos extra�a que esta ciencia est� todav�a
en pa�ales, a�n en las etapas experimentales, y con otros aspectos del
esoterismo a ser desarrollados s�lo a medida que el alma del hombre puede
dominar mejor todos los asuntos de su personalidad.
En este libro se describen las t�cnicas de curaci�n de los
siete rayos, las leyes y reglas de curaci�n se enumeran y se discuten; se
da en detalle los requerimientos para la curaci�n y se muestran las causas
b�sicas de la enfermedad. Aprendemos, por ejemplo, que muchas enfermedades
pueden tener origen k�rmico, que ciertas enfermedades son inherentes al
suelo y a la sustancia del planeta, y que muchas otras son psicol�gicas y
surgen en los cuerpos emocionales y mentales. Por lo tanto, se hace
evidente la necesidad de un entendimiento comprensivo tanto del paciente
como de los m�todos seguros de curaci�n.
Tambi�n se nos da una verdadera comprensi�n de la muerte
como la abstracci�n o retiro del alma de su cuerpo, para continuar su vida
en su propio plano sin las limitaciones del mismo, hasta que se hace
necesario un nuevo ciclo de encarnaci�n y experiencia.
En el esfuerzo para aplicar la ense�anza dada en "Curaci�n Esot�rica",
aquellos cuyo destino yace en esta �rea de servicio humano, comenzar�n a
desarrollar la facultad espiritual necesaria para la curaci�n del hombre
en su totalidad. Y esto concernir� cada vez m�s a grupos de trabajadores
que usan el poder magn�tico y de radiaci�n de la energ�a e invocaci�n de
grupo. La correcta pr�ctica de la curaci�n esot�rica se adapta por lo
tanto al desarrollo, en la nueva era de la conciencia grupal, y el
establecimiento de correctas relaciones de energ�a que apoyan todos los
aspectos del entrenamiento esot�rico en el mundo de hoy. No s�lo el
curador potencial sino todos los ocultistas aprender�n mucho del estudio
de �La Curaci�n Esot�rica".
Publicado por: Editorial Fundaci�n Lucis - Buenos Aires
- Argentina
Cap�tulo I
- LAS CAUSA PSICOL�GICAS DE LAS ENFERMEDADES
1.
Causas Originadas en la Naturaleza Emocional-Deseo.
A. Emoci�n Incontrolada y Mal Regulada.
B. Deseo, Reprimido o Prevaleciente.
C. Enfermedades Producidas por la Preocupaci�n y
la Irritabilidad.
2. Causas que Surgen del Cuerpo Et�rico.
A. Congesti�n.
B. Falta de Coordinaci�n e Integraci�n.
C. La Sobreestimulaci�n de los Centros.
3.
Causas que se Inician en el Cuerpo Mental
A. Actitudes Mentales Err�neas.
B. Fanatismo Mental. El Dominio de las Formas
Mentales.
C. Idealismo Frustrado.
El Sagrado
Arte de Curar.
Reglas
Preliminares para la Curaci�n por Radiaci�n.
Tres Leyes
Mayores para la Salud.
Resumen de
las Causas de las Enfermedades.
4.
Enfermedades Originadas en la Vida del Discipulado.
A. Enfermedades de los M�sticos.
B. Enfermedades de los Disc�pulos.
Los
Centros y el Sistema Glandular.
Los
Siete Centros Principales.
El
Cuerpo, la Apariencia Fenom�nica.
Los
Siete Centros Mayores (continuaci�n).
El
Cuerpo Et�rico, los Sistemas Nervioso y End�crino.
Efectos
Producidos en Zonas Espec�ficas
Efectos
de la Subestimulaci�n y Superestimulaci�n de los Centros.
Cap�tulo
II - CAUSAS QUE EMANAN DE LA
VIDA GRUPAL
1.
Enfermedades de la Humanidad, Heredadas del Pasado.
A. Enfermedades Ven�reas y Sifil�ticas.
B. Tuberculosis.
C. C�ncer.
2.
Enfermedades que Surgen de las Confusas Condiciones Planetarias.
3.
Enfermedades Raciales y Nacionales.
Cap�tulo III - NUESTRAS DEUDAS K�RMICAS
1.
Las Deudas K�rmicas del Individuo.
2. Karma Causado por los Siete Rayos.
Cap�tulo
IV - RESPUESTAS A ALGUNAS PREGUNTAS
SEGUNDA PARTE
REQUISITOS B�SICOS
PARA LA CURACI�N
Cap�tulo V
- EL PROCESO DE RESTITUCI�N
1. La
Naturaleza de la Muerte.
El Temor a la Muerte.
Definici�n de la Muerte.
Prop�sitos de la Muerte.
El Arte de Morir.
2.
El Acto de la Restituci�n.
Factores que Enfrenta el Alma que se Retira.
Dos Importantes Razones para la Cremaci�n.
Secuencia de los Acontecimientos durante la Muerte.
3.
Dos Preguntas Importantes.
Cap�tulo
VI -
EL ARTE DE LA ELIMINACI�N
Actividades
Iniciadas Inmediatamente despu�s de la Muerte.
La Experiencia en el Devachan.
D�cima Ley de Curaci�n.
Cap�tulo
VII - LOS PROCESOS DE INTEGRACI�N
Significado
de la Integraci�n.
El Estado Mental del Alma.
La Eliminaci�n de la Forma Mental de la Personalidad
TERCERA PARTE
LAS LEYES
FUNDAMENTALES DE LA CURACI�N
Cap�tulo
VIII - ENUMERACI�N Y APLICACI�N DE LAS
LEYES Y REGLAS
Ley I
Ley II
Regla Uno
Ley III
Ley IV
Regla Dos
Ley V
Regla Tres
Ley VI
Ley VII
Regla Cuatro
Ley VIII
Regla Cinco
Ley IX
Regla Seis
Ley X
Cap�tulo IX - LOS SIETE M�TODOS
DE CURACI�N
Las Energ�as de los Siete Rayos.
Los Rayos del Curador y del Paciente.
Las Siete T�cnicas de Curaci�n.
Las Siete Afirmaciones.
Abriendo espacios de
servicio para hombres y mujeres inteligentes y de buena voluntad
"Que la Humanidad constituya vuestro campo de servicio y
pueda decirse de ustedes que, conociendo los hechos
espirituales fueron parte din�mica de los mismos, que no
se diga que conoc�an estas cosas y no hicieron nada ni
se esforzaron por hacerlo. Tampoco permitanque
el tiempo se deslice cuando
trabajan."
