El futuro es halagüeño, siempre que el hombre pueda aprender las
actuales lecciones que le fueron presentadas con toda claridad;
debe aceptarlas y comprender claramente la naturaleza del
problema y de la crisis, con sus numerosas ramificaciones y
diversas inferencias.
...Un índice de esta crisis lo tenemos en la forma lenta y
cuidadosa con que se organiza el Nuevo Grupo de Servidores del
Mundo. Sus miembros están supervisando e introduciendo la Nueva
Era, y presenciando los dolores del nacimiento de la nueva
civilización y la llegada a la manifestación de una nueva raza,
una nueva cultura y una nueva perspectiva mundial. El trabajo es
necesariamente lento y quienes están sumergidos en los problemas
y sufrimientos, hacen difícil encarar el futuro con confianza e
interpretar el presente con claridad. (12-59).
16. El
Futuro del Grupo
1. El futuro de este grupo mundial del cual ya hemos hablado,
depende de dos cosas:
Primero, es necesario que los discípulos aislados que trabajan
en todos los países del mundo, sean conscientes unos de otros y
entren en relación telepática. Esto podrá parecer una visión
maravillosa, pero impracticable. Les aseguro que no es así. El
trabajo para establecer esta relación puede ser lento, pero es
consecuencia inevitable de la creciente sensibilidad de todas
las almas que trabajan en el campo mundial. Su primer índice es
el reconocimiento instintivo cuando se encuentran los
componentes de dicho grupo y hacen mutuo contacto por medio del
intercambio mundial. Reciben un inmediato destello de luz, un
intercambio eléctrico instantáneo, una súbita sensación de
similitud de visión y de objetivo, o una oportunidad vital de
colaborar recíprocamente y ayudar en el trabajo en el que todos
están interesados.
Cuando los discípulos activos de todas partes se encuentren,
reconocerán inmediatamente que su trabajo es idéntico y se
aconsejarán recíprocamente sobre la forma en que serán posibles
la colaboración y el esfuerzo suplementario. Dentro de treinta
años aproximadamente, la interrelación entre las unidades de
este grupo (por dispersos que estén en todo el mundo) será tan
estrecha, que se reunirán diariamente a una hora determinada y
en un lugar secreto.
...El segundo requisito que establecerá relación entre los
discípulos activos de este grupo es la capacidad de recordar,
constante y correlativamente, tanto la vida interna como la
externa. Lo denominamos continuidad de conciencia, y con esto
significamos poder ser plenamente conscientes de los
acontecimientos, en todas las esferas y sectores del ser,
durante las veinticuatro horas del día. Hasta ahora está muy
lejos de ser así, no existe verdadera percepción de la
existencia durante las horas de sueño. La vida de los sueños,
como se la define, está tan llena de ilusión como cualesquiera
de las experiencias síquicas inferiores. El lento aumento de
interés por los sueños, desde el punto de vista de la sicología
y la investigación de sus probables fuentes, son las primeras
débiles tentativas hacia el establecimiento de esta conciencia
sobre una base verdaderamente científica. Aún no existe un
consciente registro de la actividad mental durante esos
momentos, cuando el cuerpo emocional por ejemplo, es el centro
del escenario. ¿De qué se ocupa la mente durante un largo
período de perturbación emocional? Sabemos que tiene vida propia
y leyes. Por otra parte, ¿cuáles son las actividades del alma
cuando la personalidad está ocupada exclusivamente con sus
propios asuntos? ¿Pueden imaginar una época en que el desarrollo
de la conciencia alcance la etapa donde existe una reacción
sensoria, en todos los sectores de la naturaleza del hombre y
todo sea registrado por el cerebro? Los hombres ya son
conscientes de la actividad del plano físico y simultáneamente
de la vivencia emocional. Esto, para la mayoría, es una
condición común y corriente. Donde es posible registrar dos
actividades a la vez, ¿por qué no tres o cuatro al mismo tiempo?
Tal vez el futuro que tiene por delante la raza, y los
discípulos activos serán los primeros en expresar y demostrar
esta expansión de conciencia.
De este modo deben ser desarrollados y acrecentados, porque
también están íntimamente eslabonados entre sí.
He puntualizado el desarrollo del futuro inmediato del discípulo
individual. ¿Qué tiene por delante el grupo en el futuro
inmediato?
Ante todo, un período preliminar en que surgirá la conciencia
pública y hará así sentir su presencia. Esto se efectuará
mediante la constante comunicación de los nuevos ideales y el
continuo énfasis puesto sobre la unicidad esencial de toda la
humanidad, resultado de la uniformidad y la inclusividad de la
nota emitida en todas partes. Durante esta etapa no debe haber
trabajo apresurado ni acción precipitada de ninguna especie.
(4-307/10).
2. Más adelante, como resultado de su relación telepática y de
sus conferencias conjuntas, surgirán ciertos grupos y escuelas
esotéricas de desarrollo, con el fin de equiparlos más
rápidamente para el servicio mundial. En estas escuelas se
enseñarán los métodos de meditación, la intensificación de la
vibración, las leyes del universo y el correcto empleo del color
y del sonido. Pero todo estará subordinado a la idea del
servicio y a la elevación de la humanidad. También las escuelas
mencionadas en el libro Cartas sobre Meditación Ocultista
vendrán gradualmente a la existencia. (4-312).