[
El Nuevo Grupo de Servidores del Mundo
]
24. Preparaci�n para la Reaparici�n de Cristo
1. Hemos considerado la necesidad de la preparaci�n para la
venida de Cristo y algunos de los requisitos fundamentales que
van surgiendo a medida que la gente se apresta para la actividad
requerida, incluso el de reunir los fondos necesarios para
llevar adelante el trabajo preparatorio. El colabora�dor
individual, ante todo, tiene que determinar si su incentivo y
expectativa espirituales son adecuados para la tarea que tiene
por delante. �nicamente tiene importancia lo que da impulso a la
acci�n, y s�lo ser� apto para el trabajo de aquel cuya visi�n
sea suficientemente clara como para permitirle trabajar con
comprensi�n y sinceridad. Debe descubrir que le es posible
desempe�ar su arte en el desarrollo del Plan divino. La realidad
del Cristo y la aut�ntica posibilidad de Su reaparici�n deben
convertirse en importantes factores motivadores en su
conciencia. Debe buscar a su alrededor aquellos con quienes
puede trabajar, y poseen los mismos objetivos espirituales. De
esta manera, y a su debido tiempo, aprende que existe en la
Tierra un grupo integrado y bien organizado al que se le puede
denominar Nuevo Grupo de Servidores del Mundo y descubre que se
hallan en todas partes, act�an en cada pa�s, en todos los grupos
religiosos organizados y en los que se dedican al bienestar de
la humanidad y a la preparaci�n para el retorno de Cristo.
Este grupo a pesar de trabajar en el plano cotidiano de la vida
material, conserva sin embargo una estrecha e �ntima integraci�n
espiritual con el centro de energ�a del que puede extraer todo
lo necesario para el trabajo espiritual activo. Adem�s
proporciona un campo de servicio para todos aquellos que tratan
de expresarlo; tambi�n constituye el lugar de reuni�n para
quienes desean ser probados y donde sus m�viles y constancia
ser�n puestos a prueba antes de darse la oportunidad espiritual.
As� queda libre para trabajar en zonas de servicio cada vez m�s
amplias.
El Nuevo Grupo de Servidores del Mundo proporciona esencialmente
un campo de entrenamiento y de experiencia para quienes tienen
la esperanza de elevarse espiritualmente y capacitarse para ser
disc�pulos activos, dirigidos por el Cristo. La aparici�n de
este grupo en la tierra, en estos momentos, es uno de los
indicios del �xito obtenido en el proceso evolutivo, tal como se
aplica a la humanidad. Este m�todo de trabajo -utilizar a los
seres humanos como agentes para llevar adelante la tarea de
salvaci�n y elevaci�n del mundo - fue iniciado por Cristo Mismo,
que trabaj� frecuentemente con los hombres, por medio de otros,
llegando a la humanidad por intermedio de Sus doce ap�stoles, y
considerando a Pablo como el sustituto de Judas Iscariote. El
Buddha prob� el mismo sistema, pero al principio Su grupo estuvo
m�s relacionado con �l que con el mundo de los hombres. Cristo
envi� a Sus Ap�stoles al mundo para alimentar a las ovejas y
buscar a los hombres, guiarlos y convertirlos en �pescadores de
hombres�. La relaci�n de los disc�pulos de Cristo con el Maestro
fue solo secundar�a, siendo de primordial importancia las
exigencias del mundo; esta actitud a�n predomina en la
Jerarqu�a, sin menoscabar su devoci�n por el Cristo. Lo que el
Buddha instituy� simb�licamente, y en forma embrionaria, se
convirti� en una exist�encia y en una realidad debido a las
demandas de la era pisciana.
En la Era de Acuario, en la que estamos entrando, este tipo de
trabajo grupal alcanzar� un punto muy elevado de desarrollo y el
mundo ser� salvado y reconstruido por grupos m�s bien que por
individuos. En el pasado tuvimos los salvadores del mundo --esos
Hijos de dios han dado a los hombres un mensaje que trajo mayor
luz a los pueblos. Ahora, en la plenitud del tiempo y a trav�s
de los procesos evolutivos, est� surgiendo un grupo que traer�
la salvaci�n al mundo y que (incorporando las ideas grupales y
acentuando el significado de la iglesia de Cristo) estimular� y
energetizar� de tal manera la mente y el alma de los hombres,
que la nueva era se iniciar� con la ciencia del Amor, del
Conocimiento y de la Armon�a de Dios Mismo, como tambi�n con la
reaparici�n de Cristo, el cual personificar� estas tres
facultades.
En los �ltimos diez a�os este Nuevo Grupo de Servidores del
Mundo ha sido reorganizado y revitalizado, expandi�ndose el
conocimiento de su exist�encia por todo el mundo. Actualmente
constituye un grupo de hombres y mujeres de todas las
nacionalidades y razas, pertenecientes a todas las
organizaciones religiosas y movimientos humanitarios que est�n
fundamen�talmente orientados, o en proceso de hacerlo, hacia el
Reino de Dios. Son disc�pulos de Cristo que trabajan
conscientemente y, con frecuencia, lo hacen inconscientemente,
para su Reaparici�n; son aspirantes espirituales que tratan de
servir y convertir en realidad el Reino de Dios en la Tierra;
son hombres de buena voluntad que poseen inteligencia y procuran
acrecentar la comprensi�n y las correctas relaciones humanas
entre los hombres. Este grupo comprende dos grupos importantes:
i. Los
disc�pulos de Cristo que trabajan conscientemente para
desarrollar Sus planes y aquellos que, instruidos por los
primeros, colaboran consciente y voluntariamente. A esta �ltima
categor�a podemos per�tenecer nosotros si lo deseamos y estamos
dispuestos a hacer los sacrificios necesarios.
ii. Los
aspirante, hombres y mujeres conscientes, aunque trabajan
incons�cientemente guiados por la Jerarqu�a espiritual. Hay
muchos de ellos, que ocupan especialmente cargos destacados, y
se desempe�an como destructores de las antiguas formas o
constructores de las nuevas. No tienen conciencia de ning�n plan
interno sint�tico, pero se ocupan desinteresadamente de
satisfacer las necesidades del mundo lo mejor que pueden,
desempe�ando una parte importante en el drama nacional, o
trabajando firmemente en el campo de la educaci�n.
El primer grupo tiene cierta medida de contacto con la Jerarqu�a
espiri�tual, y en mayor medida con los verdaderos disc�pulos;
sus miembros trabajan inspirados espiritualmente. El segundo
grupo est� en m�s �ntimo contacto con las masas y trabaja para
inspirar ideas a ellas. El primer grupo se ocupa del Plan de
Cristo, en la medida en que sus miembros pueden captar su
esencialidad, mientras que el segundo trabaja con nuevos
conceptos y espe�ranzas que afloran a la conciencia del g�nero
humano a medida que los hombres, subjetiva y frecuentemente
inconscientes, responde a la preparaci�n para la reaparici�n de
Cristo. Como resultado del trabajo que realiza el Nuevo Grupo de
Servidores del Mundo, la humanidad va despertando
cons�tantemente a las posibilidades futuras.
El despertar de las clases intelectuales al reconocimiento de
una humani�dad, es el preludio del establecimiento de la
hermandad. La unidad de la familia humana ya es reconocida por
el hombre, pero antes de que esa unidad pueda adquirir y adoptar
una forma constructiva, es esencial que un mayor n�mero de
personas que piensan, derriben las barreras mentales que existen
entre razas, naciones y clases, y tambi�n que el Nuevo Grupo de
Servidores del Mundo reedite en el mundo externo ese tipo de
actividad que la Jerarqu�a expres� cuando desarroll� y
materializ� el Nuevo Grupo de Servidores del Mundo. Por medio de
la impresi�n y expresi�n de ciertas grandes ideas, hay que
hacerles comprender a los hombres de todas partes los ideales
funda�mentales que regir�n la nueva era. Esta es la principal
tarea del Nuevo Grupo de Servidores del Mundo.
A medida que estudiamos y aprendemos a reconocer en todas sus
ramas y esferas de actividad al Nuevo Grupo de Servidores del
Mundo - que, diseminados por el mundo, abarca a los sinceros
trabajadores y a la gente humanitaria de todas las naciones,
religiones u organizaciones de car�cter humanitario - nos
daremos cuenta que hay en la tierra un grupo de hombres y
mujeres que por su n�mero y actividades son capaces de producir
los cambios que permitir�n a Cristo caminar nuevamente entre
nosotros. Esto ocurrir� s� est�n verdaderamente interesados,
preparados para hacer los sacrificios necesarios y dispuestos a
suprimir las diferencias nacionales, religiosas y organizadas,
como para que pueda llevarse a cabo el servicio que har� posible
la reconstrucci�n del mundo. Deben educar a la raza humana,
sobre unas pocas, simples y fundamentales esencialidades y
familiarizar a la humanidad con la idea de la reaparici�n de
Cristo y la exteriorizaci�n del Reino de Dios. En gran parte su
trabajo consistir� en resumir y hacer m�s efectivo el trabajo de
los dos Hijos de Dios, el Buddha y el Cristo.
El �xito del trabajo del Nuevo Grupo de Servidores del Mundo es
inevita�ble; ha hecho un gran progreso durante los �ltimos diez
a�os. ( Publicado en 1948: compilador.) La integra�ci�n interna
de la parte de ese grupo que trabaja en �ntimo contacto con el
Cristo y la Jerarqu�a espiritual, es de tal magnitud que su
�xito externo est� garantizado. Proporciona un canal a trav�s
del cual la Luz, el Amor y el Poder del Reino de Dios, pueden
llegar a los trabajadores m�s exot�ricos.
Por lo tanto, debemos comprender que las personas
espiritualmente orientadas y todos aquellos que procuran
trabajar y trabajan para establecer correctas relaciones
humanas, los que practican la buena voluntad y se esfuerzan
verdaderamente por amar a sus semejantes, forman parte
integrante del Nuevo Grupo de Servidores del Mundo, y su tarea
m�s importante en los momentos es preparar el camino para la
reaparici�n de Cristo.
Perm�taseme expresar enf�ticamente que el m�todo principal del
que podemos servirnos y el instrumento m�s poderoso en manos de
la Jerarqu�a espiritual, es la difusi�n de la buena voluntad,
fusionada en una potencia y activa. Prefiero esta expresi�n a
las palabras �organizaci�n de buena voluntad�. La buena voluntad
es hoy un sue�o, una teor�a, una fuerza negativa. Debiera
desarrollarse hasta convertirse en una realidad, un ideal activo
y una energ�a positiva. Este es nuestro trabajo, y nuevamente se
nos exhorta a colaborar. (8-156/61).
2. Las primeras se�ales de que Se aproxima con sus disc�pulos ya
pueden ser percibidas por quienes observan e interpretan
correctamente los signos de los tiempos, pudiendo observarse,
entre otros signos, la uni�n espiritual de los que aman a sus
semejantes, que es en realidad la organizaci�n del ej�rcito
f�sico externo del Se�or - ej�rcito cuya �nica arma es el amor,
la correcta palabra y las correctas relaciones humanas. El
establecimiento de esta organizaci�n des�conocida ha continuado
con extraordinaria rapidez durante la post guerra, pues la
humanidad est� cansada de odios y controversias.
Los colaboradores de Cristo est�n activos en el Nuevo Grupo de
Servido�res del Mundo, constituyendo el grupo m�s poderoso de
precursores que jam�s hubo precedido la entrada de un gran
Personaje mundial en la palestra del vivir humano. Su trabajo e
influencia hoy se ven y se sienten en todas partes y nada puede
destruir lo ya realizado. (8-42) y (13-493/4).